Legaltech es la implementación de la Tecnología en los servicios legales con la finalidad de hacer más eficientes y seguros los procesos.
Las nuevas tecnologías han obligado a las empresas a utilizar nuevas herramientas tecnológicas e integrarlas dentro de sus procesos.
De acuerdo a un estudio realizado por Aspel, el 83% de los negocios en México utilizan tecnología en sus procesos. Además, la encuesta de liderazgo CIO Survey 2020 de Harvey Nash / KPMG nos revela que las empresas gastaron alrededor de 15,000 millones de dólares adicionales a la semana en tecnología durante la pandemia.
En realidad, lo que no se previó fue que la tecnología se quedaría en sus procesos de manera permanente. Ciertamente esta situación no solo le ocurrió a las empresas grandes, sino también a PyMes y freelancers. Como resultado, se incrementó la rentabilidad de sus negocios en un panoramas cada vez más competitivo.
De acuerdo al estudio de KPMG anteriormente citado, el 50% de las organizaciones consideradas extremadamente eficaces, hacen inversiones adicionales de entre 21% y 50% en uso de tecnología.
Esto desembocó una división mayor entre organizaciones que impulsan su estrategia por medio de tecnología y las que no.
México es un país en vías de desarrollo, especialmente en acceso a tecnologías.
La falta de tecnología ha detenido el desarrollo de modelos de negocio, específicamente en el departamento legal de cada empresa. Como resultado, los negocios no tienen idea de cómo implementar tecnología, y mucho menos en sus procesos legales.
La tecnología cambió las reglas del juego, los productos y servicios cambiaron significativamente a causa de las nuevas necesidades del mercado.
El sector legal no fué la excepción, actualmente existen muchas novedades tecnológicas dentro del Derecho Corporativo mexicano.
Anteiormente no se consideraba sencillo facilitar al cliente una solución legal a través de tecnología. Debido a la imagen del “tradicional abogado” que cobra por horas, con la fama de “hacer menos en más tiempo”.
A la empresa le interesa que el abogado haga la mayor cantidad de cosas en el menor tiempo posible, por otro lado, al abogado le interesa hacer la menor cantidad de cosas en el mayor tiempo posible.
Pensamiento que entra en conflicto con los productos del Legaltech, pues libera tiempo al abogado para que haga más tareas. Esto arroja una contraposición entre las propuestas de valor del mundo de la tecnología contra los problemas del abogado.
Considerar a la tecnología en los procesos legales resulta no sólo una opción, sino una necesidad para las PyMes y grandes corporaciones. Un ejemplo muy novedoso es la firma de actas de asamblea con firma electrónica, lo cual es posible con Legaltech.
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En el Derecho Mercantil, el Legaltech permite prestar servicios jurídicos a los clientes en plazos cortos, ofreciendo facilidades y consiguiendo lograr objetivos propuestos en el menor de los tiempos, con todas las garantías legales y la máxima calidad.
Entre los procesos internos y el Legaltech existen diversos actores principales:
En el mundo jurídico mexicano ha sido difícil adaptarse a las tecnologías emergentes, creer que un acta de asamblea puede ser firmada con la firma electrónica simple o avanzada y tener validez legal sigue siendo poco creíble, pero es completamente válido.
¿Qué sigue? No lo sabemos, ya vemos situaciones de patentes en el metaverso, es posible que veamos actas de asamblea en el mismo, la certificación notarial para actos realizados a través de realidad virtual,etc.
Las opciones son muchas, pero las conclusiones son inciertas.