¿Por qué no constituirse como SAS?
La SAS es la Sociedad de Acciones Simplificadas, es un tipo de Sociedad Mercantil regulada por la Ley General de Sociedades Mercantiles. Pero, ¿por qué no constituirse como SAS?
Es un tipo de sociedad muy nuevo en comparación con las sociedades mercantiles más comunes y muy conocidas como lo son la Sociedad Anónima de Capital Variable (SA de CV), Sociedad Anónima Promotora de Inversión de Capital Variable (SAPI de CV) y Sociedad de Responsabilidad Limitada de Capital Variable (S de RL de CV).
La SAS es una empresa que por su novedad se ha vuelto bastante popular entre los nuevos negocios, PYMES y emprendedores, sin embargo, queremos compartirte algunos motivos por los cuales no te recomendamos iniciar tus negocios como una SAS.
Comenzar de esta manera, podría parecer la idea, más sencillo y económico en un principio, pero en realidad puede volverse la opción más complicada y costoso, e incluso puede ser bastante riesgoso para los socios.
1. RESPONSABILIDAD SOLIDARIA
Este es el punto más preocupante sobre constituir una SAS. Uno de los principales puntos y ventajas de constituir una sociedad mercantil, es que los socios buscan separar el patrimonio personal de patrimonio de la empresa, buscando limitar su responsabilidad.
En el caso de la SAS, estas ventajas no sucede en ciertos casos, por ejemplo:
- Si no realizan la transformación de SAS a otro tipo de sociedad mercantil en caso de que sea necesario por las limitaciones de la SAS → los socios responderán frente a terceros, subsidiaria, solidaria e ilimitadamente
- En caso de la comisión de conductas que sean consideradas delitos, los socios serán subsidiariamente o solidariamente responsables con la sociedad.
2. Falta de personalización de tu acta constitutiva
El proceso se realiza por medio de un sistema de Secretaría de Economía y no te permite modificación ni personalización del contenido del acta constitutiva para tu empresa.
La constitución de la empresa se realiza usando un formato predeterminado por Secretaría de Economía al cual los socios deben de apegarse.
Constituirse como SAS implica que los socios no puedan agregar u omitir características específicas para el funcionamiento de su empresa.
3. ¿Constitución en 24 horas?
Se supone que la duración del proceso es de 24 horas, sin embargo, en la práctica existe una gran incertidumbre sobre si el sistema de Secretaría de Economía se encontrará funcionando correctamente. Esto implicaría que tu proceso no dure 24 horas, sino incluso semanas o meses.
Por otro lado, el proceso no es 100% digital, ya que para obtener tu e.firma(FIEL) es necesario que acudas personalmente a obtenerla en las oficinas de SAT.
4. Ingresos limitados, inversión limitada
Si tu negocio está constituido como SAS no podrás tener ingresos superiores a $5,000,000.00 (cinco millones de pesos 00/100 M.N.).
Además, en la práctica este tipo de empresa no te permitirá recibir inversión de cualquier tipo para el desarrollo de tu negocio.
5. No podrás hacer modificaciones
Una vez creado la empresa, no podrás realizar modificaciones en las actividades estipuladas en el objeto social de la empresa.
Lo que quiere decir es que si quieres ampliar las actividades de tu empresa para vender nuevos productos y ofrecer otro servicios, no podrás hacerlo.
6. Dificultades para abrir cuentas bancarias
Comúnmente al acudir a un banco a aperturar una cuenta bancaria el proceso es complicado y muy tardado debido a que incluso los sistemas internos de los bancos no consideran este régimen, al ser un tipo de empresa tan nuevo y desconocido.
Existen alternativas accesibles y fáciles de constituir que no cuentan con las limitantes y desventajas que te planteamos.
En EasyLex podrás constituir una Sociedad Anónima de Capital Variable (SA de CV), Sociedad Anónima Promotora de Inversión de Capital Variable (SAPI de CV) y Sociedad de Responsabilidad Limitada de Capital Variable (S de RL de CV) 100% en línea.